Todos nos hemos imaginado alguna vez la posibilidad de que un niño tan cabrón como Shin-Chan existiera en la realidad, y solo hemos tenido que mirar a nuestro hermano/primo/sobrino para comprobar que los hay por todas partes. Lo realmente extraño sería encontrarse con un crío exactamente igual a Shin-Chan. Pero estas imágenes nos confirma que existe, y es un marginado social.
En esta primera imagen lo vemos intentando entablar conversación con un niño dándole un inocente regalo. El niño lo acepta temeroso, pero finalmente saldrá huyendo espantado de ese ser con esa cabeza de dos metros de diámetro y esas cejas que parecen dos ratas acostadas.
Más tarde, conseguirá la amistad de una pequeña niña (ciega, claro), pero la policía, al verlo, lo detendrá por presunta corrupción de menores ya que, según declaraciones del agente que lo detuvo. "
Esa mirada solo puede pertenecer a la de un pervertido"
Triste, melancólico, y después de pagar la fianza que lo sacó del calabozo, el niño que era igual que Shin-Chan se sienta en el banco de un parque preguntándose que malvado fue Dios al otorgarle aquel careto, que tanta gracia hacía en la televisión y tanto terror provocaba en el mundo real. Solo encontró consuelo en su compañero y mascota, Nevado, pero al poco se dio cuenta de que ese perro no era el suyo y solo recuerda haber visto al auténtico Nevado entrar, alegremente, en el restaurante coreano de la esquina.
Etiquetas: Personajes Míticos
Esta entrada fue escrita el 21 junio 2006